Por Pegaso
¿Whatttt? ¿Qué locura estamos viviendo? ¿Seremos como aquel personaje del Tarot llamado “El Loco”, que a pesar de tener un abismo por delante sigue avanzando como si nada, sin escuchar al perrillo que le ladra para que se detenga?
Hombres que se sienten mujeres, locos que creen en extraterrestres, hordas de estúpidos que piensan que La Tierra es plana, y para acabarla de joder, una inmensa mayoría de personas que consideran que la narcocultura es un modelo de vida aceptable. ¿A cuál de ellos pertenece usted?
No es pregunta retórica. Haciendo un cálculo conservador, más del 80% de la población mundial participa de ese estado de alienación.
Fíjense. No lo estoy inventando. En Tik Tok, una de las redes sociales más utilizadas en el planeta, aparecen mensajes como el siguiente: “Julio 20 a 23. Contacto alienígena. Prepárate!!!!!! Mensaje arcturiano: “Canalizando a través de Maya Luz pasaremos sobre La Tierra y nuestras naves podrán ser vistas. Pero lo esencial no es vernos… es sentir lo que dejaremos a nuestro paso”.
Y son mensajes que se repiten hasta el cansancio, con algunas modificaciones. Después vienen otro tipo y así, sucesivamente, cada cual más absurdo y estrambótico, como queriendo hacernos perder la poca razón que aún nos queda en la sesera.
En los últimos dos días he visto un “interesantísimo” debate relacionado con la idea que alguien sin quehacer retomó y que ahora se ha vuelto muy popular entre gente ignorante: Que La Tierra no es redonda, sino plana.
Los “terraplanistas” aseguran que nuestro planeta es un disco, cuyos bordes están compuestos por una barrera de hielo de varios kilómetros de altura, que estamos bajo una cúpula de vidrio o de energía que no pueden cruzar nuestros aviones y naves espaciales; que El Sol y la Luna son del mismo tamaño y que la noche y el día ocurren porque ambos astros se mueven en círculos; además, que el agua jamás se curva, ya que siempre busca su nivel, donde quiera que esté contenida.
Tales genios han hecho experimentos con rayos láser para medir la supuesta curvatura de la superficie terrestre, citan leyes físicas, hacen complicados cálculos trigonométricos y de ingeniería avanzada (o al menos eso es lo que creen ellos) para comprobar su narrativa.
En síntesis, afirman que los científicos y los gobiernos nos tienen engañados asegurando que La Tierra es redonda y que, a la luz de los nuevos descubrimientos que ellos han hecho, debemos replantearnos el convenido de La Historia, tal como la conocemos.
Creo que si Eratóstenes viviera, se volvería a morir de risa.
Hay miles, miles de pruebas científicas y empíricas que prueban que los planetas como el nuestro y los demás astros son esféricos, por la misma fuerza de gravedad.
-Pe-pe-pero si fuera redonda se llamaría redondeta. Más, como es plana se llama planeta-diría uno de los más avezados terraplanistas.
Gente que, sin duda, pasó por la escuela y reprobó hasta el recreo.
-¿Y si Jaime Maussán siempre tuvo la razón? ¿Y si pronto habrá un encuentro con una civilización extraterrestre?-preguntarían otros.
-Bueno-les contesto. Si eso es cierto y entre el 20 y el 23 de julio llegan los Arcturianos bailando cha-cha-chá, voy y les beso los juanetes a ellos y a los extraterrestres.
Pero tranquilos. No pasará nada. El mundo seguirá rodando. Habrá situaciones causadas por nosotros mismos que nos parecerán raras, enigmáticas o sobrenaturales, pero a final de cuentas se sabrá con certeza que siempre hay una explicación lógica.
Por cierto, la explicación lógica a toda esa locura es la tremenda influencia que tienen las redes sociales sobre la gente crédula e ingenua.
Viene el refrán estilo Pegaso: “Yo lo deposito y ella lo traslada a otro sitio”. (Yo lo coloco y ella lo quita).
