Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. Cientos de líneas de drenaje colapsan cada año a consecuencia de los tapones de grasa, provocando los molestos caídos y fugas de aguas negras.
Es por eso que la Dirección de Ecología echó a andar desde el año pasado un programa para dotar de trampas de grasa a los pequeños comerciantes del área urbana y de las colonias para que las instalen y puedan evitar que lleguen a causar ese tipo de problemas.
La titular de esa dependencia, arquitecta Nohemí Alemán comunicó que se han entregado gratuitamente hasta ahora cien trampas de grasa, y el programa seguirá adelante hasta llegar al mayor número posible de taquerías, fondas y demás pequeños negocios que se dedican al procesamiento y venta de alimentos.
Pero incluso, los comercios formales deben contar con este tipo de dispositivos a fin de prolongar la vida útil de la red de drenaje de la ciudad.
La funcionaria mencionó que los usuarios de estas trampas de grasa deben vaciarlas cuando estén llenas y colocar su contenido en bolsas herméticas para después entregarlas al camión de limpieza pública para su disposición final.