Líderes Competitivos

Líderes Competitivos

Por Marcos Olivares

Este 1ero. de mayo, observe fotografías y videos de la marcha obrera en mi querida Reynosa, escenas que me impresionaron al ver tantas personas marchar para conmemorar el Día Internacional del Trabajo, esto me llevó a reflexionar sobre el futuro de todas esos trabajadores, dado que la IA avanza a pasos agigantados y no tendrá misericordia para cancelar y/o transformar muchos de esos empleos que ahora desarrollan.

La llegada de la Inteligencia Artificial (IA) ha acelerado ese cambio. No se trata solo de automatización, sino de una transformación profunda de los procesos, tareas y perfiles laborales.

Por ende, las universidades deben apurar el paso y redefinir sus asignaturas académicas, así como, preparar a sus mentores para capacitar a sus alumnos en las nuevas tecnologías, y no generar alumnos obsoletos, porque la IA no es FB, ni X y menos TikTok, la IA viene a romper con los formatos habituales de realizar las tareas y trabajos tradicionales.

La tecnología no reemplaza a las personas, pero si los obliga a adaptarse. Un ejemplo claro está en la medicina. Se desarrollan robots con IA capaces de realizar cirugías complejas con precisión milimétrica, pero sigue siendo esencial la presencia del médico para diagnosticar, decidir y acompañar.

Esto nos obliga a reflexionar y determinar la relación equilibrada y armónica entre seres humanos y máquinas desde una perspectiva ética y colectiva, donde las habilidades blandas se han vuelto más valiosas, ya no es solo el conocimiento técnico, sino su capacidad para colaborar, adaptarse, comunicar y tomar decisiones en escenarios inciertos.

Así como, la empatía, el pensamiento crítico, la inteligencia emocional, la innovación, el trabajo en equipo, la visión sustentable, la creatividad, la resiliencia: esas son las nuevas herramientas de los empleos. Por eso, hay que formar a los nuevos trabajadores en esas habilidades humanas, no solo en competencias técnicas.

Esto implica un cambio profundo en la forma de contratar, capacitar y liderar. Las organizaciones que reclutan con visión de futuro están incorporando entrevistas por competencias blandas, pruebas de liderazgo y evaluaciones 360. Ya no basta con tener una hoja  curricular impecable; se necesita saber trabajar con otros, resolver conflictos, innovar desde la escucha.

Estas carácteristicas permiten evaluar más allá del CV, capacitar constantemente en habilidades humanas, fomentar culturas laborales que valoren lo humano, liderar con el ejemplo y medir el desempeño también desde lo emocional y relacional.

No se trata solo de defender empleos, sino de rediseñarlos. Además, existe el miedo a equivocarse; pero es muy valioso aprender de los errores en un mundo cambiante.

La (IA) sin duda tendrá un impacto significativo en el mercado laboral de nuestro país, y principalmente en nuestra ciudad donde su economía depende en gran parte del sector industrial maquilador. Efectivamente,  automatizará algunos trabajos, pero también transformará muchos otros y creará nuevas oportunidades laborales.

El 1 de mayo no solo debe ser una jornada de memoria y reivindicación. También debe ser una fecha para pensar en el trabajo que viene, en cómo se forma, cómo se cuida y cómo se reinventa.

La IA traerá tanto desafíos como oportunidades. Los trabajadores que abracen la tecnología y adquieran las habilidades adecuadas para la era de la automatización inteligente tendrán un futuro prometedor.

Referencia: Editorial de EL COMERCIO.

Comentarios

Aún no hay comentarios. ¿Por qué no comienzas el debate?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *