Por Jesús Rivera
Matamoros, Tamaulipas. Una gaviota hallada muerta en la playa Bagdad, encendió las luces de alarma.
El pasado 19 de septiembre, tras las pruebas realizadas al palmípedo, se emitió la alerta epidemiológica por la presencia del virus de influenza aviar H5N1.
Se activó el cerco sanitario por parte de personal de la Secretaría de Salud y se dio el aviso para que los paseantes se abstengan de acudir a ese centro recreativo y vacacional.
La influenza o gripe aviar es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta a las aves de corral, como gallinas, gallos, guajolotes, pollos, codornices y otras. Se caracteriza por provocar coloración púrpura o amoratada en la cresta y barbilla de las aves afectadas.
Es causada por el virus del género Influenzavirus A de la familia Orthomyxoviridae.
Las aves contagiadas presentann fiebre, depresión, falta de apetito, estornudos, descarga nasal sanguinolenta, diarrea, inflamación con coloración púrpura o amoratada de la cresta y barbilla, plumaje erizado, temblores, incoordinación y amontonamiento; disminución de producción de huevos o presencia de huevos descoloridos, blandos, deformes y con albúmina acuosa.
Al detectarse un foto de la enfermedad, es necesario tomar medidas de bioseguridad tales como:
-Establecer protocolos sanitarios para las personas expuestas
-No movilizar aves enfermas
-Someter las excretas a un proceso de tratamiento térmico mayor a 56 grados
-Realizar desinfecciones periódicas, etc.
Hay dos tipos de influenza aviar: La de baja patogenicidad, que solamente causa algunos síntomas leves en las aves y la de alta patogenicidad, provocada por los subtipos H5 y H7 del tipo A.
Estos últimos tienen la capacidad de infectar a los seres humanos, con alta tasa de mortalidad.
Por ese motivo, al detectarse en la gaviota el tipo H5N1, se activaron los protocolos de control, bloqueando el acceso a la playa.
La transmisión a seres humanos ocurre por el contacto directo con las aves infectadas.
Aunque el contagio entre personas es raro, el virus tiene una alta tasa de mortalidad en personas infectadas, superando el 50% en algunos brotes.
Los síntomas en humanos pueden variar, desde leves hasta graves, afectando principalmente el sistema respiratorio, con presencia de conjuntivitis y otros síntomas sistémicos.
Desde 2020, el H5N1 ha provocado un número sin precedentes de muertes en aves silvestres y de corral en varios países. En 2025 se han reportado casos humanos en Estados Unidos, lo que ha generado preocupación sobre la transmisión entre mamíferos y el riesgo potencial para la salud pública.
¿Será esta la próxima pandemia?