La Estatua de la Libertad en realidad es una imagen de Lucifer, el Ángel Caído

La Estatua de la Libertad en realidad es una imagen de Lucifer, el Ángel Caído

Nueva York, EEUU. (De las redes sociales). En el año 1797, el artista francés François-Robert Ingouf creó una pintura titulada “Luc¡fer”, que representa al ángel caído como una figura majestuosa y poderosa. Sin embargo, lo que llama la atención es la sorprendente similitud entre esta pintura y la Estatua de la Libertad, diseñada por Frédéric Auguste Bartholdi y erigida en Nueva York en 1886.
– Ambas figuras tienen una postura similar, con el brazo derecho extendido y la mano izquierda sosteniendo un objeto (en el caso de Luc¡fer, una antorcha, y en el caso de la Estatua de la Libertad, una tabla con la ley).
– La cara de Luc¡fer y la Estatua de la Libertad comparten rasgos faciales similares, como la nariz recta y la sonrisa enigmática.
– Ambas figuras tienen una corona o diadema en la cabeza, aunque con diseños diferentes.
Algunos teóricos de la c0nspiraci0n sugieren que la Estatua de la Libertad fue diseñada para representar a Luc¡fer, el ángel caído, en lugar de la libertad y la democracia. Según esta teoría, la estatua sería un símbolo de la influencia oculta de la masonería y otras sociedades secretas en la historia de Estados Unidos.
– La similitud entre la pintura de Lucifer y la Estatua de la Libertad es difícil de ignorar.
– La Estatua de la Libertad fue diseñada por un masón, Frédéric Auguste Bartholdi, lo que podría sugerir una conexión con la simbología masónica.
– La estatua se encuentra en una isla llamada “Liberty Island”, que anteriormente se llamaba “Bedloe’s Island”, lo que podría ser visto como un juego de palabras con “libertad” y “luc¡fer”
En resumen, aunque la similitud entre la pintura de Lucifer y la Estatua de la Libertad es intrigante, no hay evidencia concluyente que respalde la teoría de que la estatua representa a Lucifer. Sin embargo, la teoría sigue siendo un tema de debate y especulación entre los teóricos de la conspiración.

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